CROMO
Es un mineral que hace posible la asimilación normal del azúcar al permitir que la insulina, hormona producida por el páncreas, trabaje en forma correcta. Con ello, las células, tejidos y músculos pueden extraer la glucosa de la sangre para funcionar adecuadamente.
En caso de que la cantidad de este elemento sea insuficiente se corre alto riesgo de padecer diabetes. Asimismo, al mantener normales los niveles de azúcar, previene la aparición de hipoglucemia, (descenso anormal de dicha sustancia en la sangre).
Conforme transcurre el tiempo, la cantidad de cromo en el organismo disminuye, lo cual es una de las causas por las que la gente adulta presenta más problemas para mantener sus niveles de glucosa normales.
Si la deficiencia de este mineral es moderada durante la infancia y adolescencia, puede pasar inadvertida y no provoca problemas en la salud.
El cromo también se encarga de:
* Disminuir la concentración de colesterol.
* Impedir la formación de proteínas causantes del envejecimiento cerebral.
* Evitar que las grasas se acumulen excesivamente en el organismo.
* Proporcionar fuerza muscular.
* Colaborar en el transporte de proteínas.
De manera natural se encuentra en aceite de maíz, cereales integrales, pimienta negra, almejas, levadura de cerveza, semillas, frutos secos, zanahorias, queso, cebolla, lechuga y papa con cáscara.
Este aporte puede enriquecerse con suplementos vitamínicos y complementos alimenticios que contengan este mineral, el cual puede ser nombrado indistintamente como cloruro, nitrato o nicotinato de cromo.
Si el consumo de este elemento es deficiente pueden presentarse problemas como:
* Diabetes.
* Cataratas.
* Problemas vasculares.
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